Mutando

Desde la lejania monzoniana os escribo para revelaros un par de cositas, quizas vayan a ser mas de dos, pero se dice asi. La primera es que cuando una llega a playas tropicales lo primerito que quiere uno es que le haga sol, para por entonces poder disfrutarlas, hay que apuntar que cuando una llega con la regla recien estrenada a susodichas playas pues como que le da un poco igual el tiempo y lo unico que quiere es mirar la programacion de los canales internacionales (lease, first class all the way, the magicians secrets, Rainman, El Doctor Dolittle, la uno, Los Soprano, Nip Tuck...) de la diminuta television de la habitacion por 4 dolares al lado de la playa que muy habilmente nos recomendo un tuktukero. Pero ya llevo cuatro dias de Monzon y estoy hasta el monyo, por no decir conyo de la lluvia que no para y de que parezca que estoy metida todo el santo dia en el Lluvia, Vapor y Velocidad de Turner, parece que la cosa no va a mejorar en los proximos dias asi que vagabundearemos por el apasionante pais khmer donde hemos preguntado a una agencia de viajes que es lo podemos hacer ya que aqui no brilla el sol y nos enviaban otra vez a Ankor (que ya he estado, esta muy lejos y es muy caro) asi que solo me resta esperar hasta el 27 porque mi visa a vietnam empieza ese dia y aqui a parte de leer, mirar la tele e inventarnos pseudopersonajes con mi companyero de fatigas , no se me ocurre que mas puedo hacer. Se aceptan ideas.

Segunda y ultima revelacion. Es una realidad. He mutado, a Rousseau, la de Lost. Una realidad la cual he ido alargando, alargando, con mis pinzas para las cejas, algun acondicionador para el pelo, una cuchilla de afeitar que me acompanya desde el supersol de la calle urgell. Pero la realidad se cierne sobre mi, que decia Cocacola, y ya no soy yo, la que era. Quizas ayudaria que os ilustrara la situacion en la que me encuentro; cuando tu mismo te lavas la mayoria de la ropa a mano en la pica de un lavabo cutre y esta tiene que secarse al viento que le da el ventilador, solo cuando tu estas dentro de la habitacion, porque es de esas que la llave es la que proporciona electricidad, pues la ropa tarda en secarse y consecuentemente una huele mal o menos bien que si se lo lavara su madre, cuando una se depila a cuchilla y no es lampinya que digamos, bueno, pues pasa lo que pasa, ya sabeis... cuando una hace caso omiso al pelo que le crece sobre el labio superior mintiendose a si misma, diciendose que la luz del sol se lo ha tenyido (cuando ni por asomo es cierto) , cuando una se adjudica como peluquero oficial al Carles, un hombre estupendo, pero que utiliza un lactovit de 2 litros para todo el cuerpo y al que hace poco tuve que explicar por decima vez la diferencia entre champu y jabon para el cuerpo... pues pasa lo que pasa: